Y resulta que los nuevos botes de Nocilla vienen decorados, son tan bonitos….no nos pudimos resistir y compramos uno… ¡un kilazo de chocolate!.
Es mucho chocolate tan de repente en casa así que me dije, hay que hacer postres chocolateros ¡pero ya!. Porque si no mi novio ya había amenazado con comérselo a golpe de cucharadas y eso sí que no lo puedo permitir, estamos en plena operación bikini y no la va a tirar por tierra de esa manera, no por él sino por mi porque no iba poder quedarme tranquila viendo como él se daba el festín chocolatástico sin mi!.
Chocolate a parte….hacía unas semanas le había pedido a un amigo, que se iba a Alemania, que me trajese un libro de repostería… pero no me trajo uno, sino tres. Entre ellos me compró uno de Nutella «Die 30 besten Rezepte» (Las 30 mejores recetas) el cual he utilizado para la receta de este post, sólo que la he cambiado un poco con algunos detalles…
Bueno, ahora si les dejo con la receta de la semana cuya finalidad es verle pronto el fondo al tarro…
- 50g de chocolate para fundir
- 150g de Nocilla
- 2 cucharadas de nata (35% materia grasa)
- 30g de nueces
- Harina de almendra o almendra molida
- 1. Poner en un cazo al fuego la nocilla, el chocolate y la nata hasta que se fundan. Una vez derretidos dejarlo atemperar.
- 2. Picar las nueces en trozos pequeños.
- 3. De la mezcla de chocolate coger porciones con una cucharilla de café y darles forma de bombón. Yo las hice rectangulares pero pueden ser redondas, ovaladas, amorfas, como más les preste.
- 4. Guardarlas en la nevera hasta que este un poco más duras. Sacarlas y cubrirlas con la almendra.
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